Comer bien, así de simple

Comer bien, así de simple

Dieta paleo, baja en carbohidratos, sin carbohidratos, baja en grasas, keto, glyx, Atkins, ayuno intermitente… hay tantas dietas y tan diferentes. Casi cada semana aparece una nueva tendencia. ¿Cómo se supone que vas a seguirlas? Y encima no es tan fácil encontrar la dieta adecuada para ti y seguirla. Pero también puedes hacer una dieta buena y saludable, sin estrés y con pautas estrictas. ¿Cómo? Te lo explicamos aquí.

Mucho de esto:

La fruta y la verdura fresca deben ser una parte integral de tu dieta diaria. La regla general es: tres porciones de vegetales y dos porciones de fruta al día. Eso está muy claro. Las frutas y verduras son ricas en minerales, sustancias vegetales y fibra. Además, la mayoría de las verduras son bajas en calorías y no se van a las caderas.

Especialmente recomendable:

Las bayas son pequeñas pero poderosas. No sólo tienen un sabor delicioso, sino que también contienen muchas buenas sustancias que tienen un efecto antibacteriano, antioxidante y regulador de la presión arterial. También tienen menos azúcar que otros tipos de fruta y, por lo tanto, también son adecuadas para los diabéticos. Los frutos secos y las semillas son pequeñas fuentes de energía. Proporcionan fibra y muchos valiosos ácidos grasos insaturados que protegen el corazón, los vasos y los nervios.

Moderadamente:

El cuerpo también necesita carbohidratos. Son un importante y rápido proveedor de energía, y especialmente nuestro cerebro se beneficia de ellos. Los investigadores de la Universidad de Tufts (Estados Unidos) han descubierto que las personas que no consumen carbohidratos tienen una memoria con un rendimiento inferior a la de las que sí los consumen. Los carbohidratos se encuentran en muchos tipos de frutas, pero también en el pan, la pasta, los copos de maíz y el muesli.

Cuando tengas la opción, elije pan y pasta integrales. El grano entero es muy superior a la harina blanca. La harina integral contiene muchos más nutrientes y fibra, y también es más saciante. Sin embargo, si deseas perder peso, debes reducir la ingesta de carbohidratos y evitar en gran medida los fideos, el pan y el arroz. Porque de esta manera se pone en marcha realmente el proceso de quema de grasa.

Menos de esto:

Carne, pescado, huevos y productos lácteos como el yogur y el quark también forman parte de una dieta completa. Estos alimentos proporcionan proteínas de alta calidad y la carne también suministra a nuestro cuerpo hierro y vitaminas B. Sin embargo, sólo se deben comer en pequeñas cantidades. La Sociedad Alemana de Nutrición aconseja a los adultos que coman sólo de 300 a 600 gramos de carne por semana. Lo mejor es, por supuesto, la calidad orgánica.

Naturaleza pura:

Cuanto más natural es un alimento, más saludable. Por eso a nuestro cuerpo le gusta especialmente la fruta fresca, las verduras y sobre todo las verduras frescas. La comida rápida o las comidas preparadas suelen ser bajas en nutrientes, pero altas en calorías. Cuando cocines, debes preparar la comida con cuidado. Las verduras crudas, los alimentos a la plancha o cocidos al vapor conservan los nutrientes y las sustancias vitales, pero desgraciadamente se pierden cuando se fríen o se cocinan durante demasiado tiempo. No todo es tan difícil, ¿verdad? Y no tienes que hacer un dogma de ello. El sentido común te dice lo que le gusta a tu cuerpo y lo que es bueno para tu salud. Y lo mejor de esta dieta tan simple: ¡Permite todo, es variada y realmente sabrosa!

Fuentes: all4family; spiegel.de; eatsmarter.de; fitforfun.de; nowtufts.edu; dge.de

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