Jugosas naranjas, dulces mandarinas y refrescantes limones son las deliciosas frutas que cultivan los agricultores de nuestra finca Rooihoogte en la soleada Sudáfrica. Muchos de ellos trabajan en las plantaciones y están mucho tiempo al aire libre, lo que es muy saludable. Sin embargo, los agricultores de la finca querían hacer algo más por su salud. Querían una sala de fitness.
La asociación de apoyo «Träume werden wahr» (“Los sueños se cumplen”), fundada por los socios comerciales de SanLucar, no lo dudó un momento y apoyó generosamente su deseo. Y así, la antigua guardería, que había quedado vacía tras la construcción de la nueva Speelskool (guardería), se convirtió en una sala de fitness para los agricultores de la finca.
Las paredes se pintaron de colores alegres, se compraron mancuernas y equipos deportivos.
 Dejar un comentario